Jerusalem Stone
Jerusalem Stone (Piedra de Jerusalén) consiste en un “limestone”, tipo de mineral clasificado como calcáreo dolomita.
Los calcáreos son rocas sedimentarias que contienen minerales con cantidades de carbonato de calcio arriba del 30%. Cuando el mineral predominante es la dolomita, la roca calcárea es denominada calcáreo dolomítico.
La dolomita, así llamada en homenaje al geólogo francés Déodat de Dolomieu, es un mineral de carbonato de calcio y magnesio muy abundante en la naturaleza bajo la forma de rocas dolomíticas, utilizadas como fuente de magnesio, sobre todo para la fabricación de materiales refractarios. En la dolomita existe una solución sólida entre el magnesio y el hierro, siendo el extremo en hierro denominado siderita y el extremo en magnesio denominado magnesita.
El origen de la dolomita constituye un gran enigma geológico, no se sabiendp mucho aún sobre su génesis. Son sugeridos modelos hidrotermales, con fluídos provenientes de grandes profundidades, a través de fallas geológicas también muy profundas; modelos de origen de interacción microbial en ambientes hipersalinos; modelos de mezclas de agua dulce y salada, entre innúmeros otros.
En particular, Jerusalem Stone es conocida como la piedra calcárea dolomítica fuerte y durable, citada entre las 12 mejores de todo el mundo. Este material alcanzó fama mundial por su gama de colores y alta densidad, y porque tanto su fuerza cuanto su resistencia fueron comprobadas en todo el mundo bajo condiciones meteorológicas extremas de calor, frío, tiempo seco, lluvias intensas, vientos fuertes y nieve. Ella puede tolerar por mucho tiempo variedad de climas.
Como las formaciones rocosas difieren en naturaleza de un lugar para otro, las características de las piedras extraídas de estas rocas varían, lo que dá versatilidad al producto.
Por este motivo, las Piedras de Jerusalén pueden ser producidas, embaladas y suministradas de acuerdo con las diversas aplicaciones para las cuales son solicitadas. Típicamente las Piedras de Jerusalén se destinan a las siguientes finalidades:
Pisos y revestimientos de paredes y columnas (interior y exterior), elementos especiales, paneles, mosaicos, piezas de decoración, muebles de cocina y de baño, acabamiento de piletas, cubiertas de mesas, artículos esculpidos con motivos religiosos y lápidas para sepulturas. Los colores también se presentan en una diversidad muy grande, como ser blanco, rojo, azul, gris, negro, crema y dorado.
Millares de años atrás, las Piedras de Jerusalén eran exportadas para tierras distantes para la construcción de templos.
Hoy Jerusalem Stone trae para sus clientes las mismas piedras que sintieron los pasos y toques de reyes, profetas, santos y tantos otros personajes bíblicos que serán eternamente reverenciados en todo el mundo. Y es justamente ahí que residen el magnetismo y fascinación que solamente las Piedras de Jerusalén pueden ejercer y que las tornan únicas.
DESCRIPCIÓN DE LAS PIEDRAS DE JERUSALÉN



